Saneamiento ecológico individual
En una época en la que la conciencia de la importancia de adoptar comportamientos ecológicos está despertando, se plantea la cuestión del saneamiento individual. Si su casa no está conectada a la red de saneamiento colectivo, debe optar por un método de saneamiento ecológico para el tratamiento de sus aguas residuales. Aquatiris le presenta los diferentes sistemas de saneamiento individual ecológico.
Definición y retos del saneamiento individual
El saneamiento individual ecológico, o saneamiento no colectivo (ANC), se refiere al conjunto de instalaciones individuales de tratamiento de aguas residuales domésticas. Abarca todos los dispositivos y técnicas que permiten la recogida, el tratamiento y la evacuación de las aguas domésticas procedentes de hogares aislados. Estas aguas incluyen las aguas negras (procedentes de los inodoros) y las aguas grises (procedentes de actividades cotidianas como la cocina, el baño, etc.).
El saneamiento ecológico individual se refiere principalmente a las viviendas que no están conectadas a la red pública colectiva (alcantarillado). Alrededor del 15-20 % de la población cuenta con un sistema de saneamiento individual. Este sistema está especialmente extendido en las zonas rurales, donde la construcción de una red colectiva de recogida de aguas residuales sería demasiado costosa.
Los retos del saneamiento individual son múltiples y revisten importancia tanto desde el punto de vista sanitario como medioambiental. Desde el punto de vista sanitario, su objetivo es prevenir la propagación de enfermedades relacionadas con una mala gestión de las aguas residuales. De hecho, las aguas no tratadas pueden contener agentes patógenos peligrosos para la salud humana. En el plano medioambiental, el saneamiento ecológico individual contribuye a limitar los vertidos contaminantes. De este modo, participa en la preservación de los recursos hídricos y en la protección de los ecosistemas acuáticos.

Los principales sistemas de saneamiento individual ecológico
Existen diferentes soluciones de saneamiento individual ecológico que puede instalar en su casa.
Sistema de fitodepuración
La fitodepuración es uno de los sistemas de saneamiento autónomo y ecológico más ventajosos para el tratamiento de aguas residuales.
Definición y funcionamiento
La fitodepuración, un método de saneamiento natural y sostenible a través de las plantas, permite descontaminar gracias a las propiedades depuradoras de las raíces de plantas específicas. Esto se consigue mediante la integración de un pantano natural. El mecanismo de la fitodepuración se basa en el uso de plantas como el junco, que actúan como un «filtro vertical» para purificar las aguas residuales.
Una vez que el agua entra en el sistema, es absorbida, filtrada y digerida por las plantas, especialmente en el complejo radicular rico en microorganismos. El ecosistema así creado permite tratar principalmente los nitratos, fosfatos y metales retenidos por el agua. Esto permite eliminar los contaminantes presentes en el agua.
El principio de la fitodepuración es similar al de la compostaje. La degradación de los contaminantes en contacto con el aire produce humus y vapor de agua. Basta con dejar tiempo a las plantas y juncos para que colonicen cada cubeta para que el proceso sea completo.
Especializados en fitodepuración. Nuestra gama «Jardín de saneamiento» le garantiza un sistema de fitodepuración eficaz: sin fosa, sin vaciado, sin olores nauseabundos y sin mosquitos. Nuestros expertos le guiarán a lo largo de todo el proceso, desde la planificación hasta la realización de su proyecto. Tanto si está pensando en un sistema de saneamiento ecológico para una vivienda unifamiliar, un lugar turístico o un proyecto agrícola, nuestro experimentado equipo puede ofrecerle una solución ecológica a medida.
Instalación de un sistema de fitodepuración
En la práctica, antes de instalar los dos estanques necesarios para una filtración óptima, se empieza por elegir las plantas adecuadas. Estas deben tener la capacidad de absorber las sustancias contaminantes específicas de cada etapa de la filtración. En el primer estanque, donde se retienen los principales agentes contaminantes, se plantan:
- carex,
- salicaria,
- iris,
- cañas,
- cañas.
Para el segundo estanque, construido debajo del primero, se trasplantan plantas depuradoras como la menta acuática, los lirios o la salicaria. Este segundo estanque permite refinar la purificación del agua. Una vez completado el ciclo, el agua filtrada está limpia, sin olor, y puede utilizarse para regar el jardín. El compost recuperado de la superficie del primer estanque de depuración también puede reutilizarse para enriquecer la tierra de los parterres, macizos y árboles ornamentales.
Las ventajas ecológicas de un sistema de fitodepuración
La fitodepuración tiene ventajas ecológicas considerables. Este sistema es una solución de saneamiento ecológico que no requiere fosas ni el uso de materiales importantes. Las plantas macrófitas se adaptan a todo tipo de suelos y resisten las variaciones de temperatura y las heladas. Además, aunque se desarrolla al aire libre, este sistema no produce ningún olor desagradable. También es fácil de mantener: basta con desherbar los estanques en primavera.
Una instalación de fitodepuración tampoco necesita energía fósil para funcionar y las aguas resultantes pueden verterse directamente en la naturaleza sin temor. Además, se trata de un sistema de saneamiento individual ecológico, sin consumo de electricidad y basado en materiales naturales. Sin embargo, la huella ecológica de una estación de fitodepuración puede ser relativamente grande (hasta 100 m²).
Si desea evitar la instalación de una fosa séptica, esta solución es una opción muy interesante. Puede sustituir perfectamente a las fosas sépticas tradicionales, ya que cumple con la normativa sobre saneamiento de aguas. Póngase en contacto con Aquatiris para instalar su sistema de saneamiento sin fosa ni vaciado.

Fosas sépticas
A diferencia de la fosa séptica tradicional, que solo se encarga del tratamiento de las aguas negras, la fosa séptica recoge y realiza el tratamiento previo de todas las aguas residuales domésticas. Solo el agua de lluvia no pasa por este sistema de fosa séptica ecológica, ya que no necesita ser descontaminada para su uso. Actualmente, este tipo de fosa es el único autorizado por la normativa, dado que la instalación de fosas sépticas está ahora prohibida.
Una fosa séptica es generalmente un tanque de plástico o de hormigón, equipado con un circuito de entrada y salida. Puede estar equipado con:
- un filtro de arena,
- un filtro plantado (filtro de caña),
- un filtro masivo.
El dispositivo está diseñado para ser estanco, evitando así la infiltración de aguas residuales en el suelo. El tanque debe ser resistente al presión y a la corrosión de acuerdo con la norma CE obligatoria. También está equipado con ventilación para evacuar los gases de fermentación, potencialmente nocivos. Se pueden añadir prefiltros aguas arriba o aguas abajo, y se han previsto mirillas para facilitar el acceso con fines de mantenimiento, vaciado y control.
Además de recoger y retener las aguas residuales domésticas con sus contaminantes, este sistema de saneamiento individual desempeña otras funciones. Licua los sólidos (acumulación de lodos y grasas) para su posterior tratamiento en una vía adecuada. Además, retiene los sólidos (lodos de decantación) y los flotantes (grasas).
Sin embargo, este sistema tiene inconvenientes. Pueden producirse posibilidades de desbordamiento. También pueden subir a la superficie olores nauseabundos. Las plantas también pueden infiltrarse en el sistema y bloquearlo, lo que puede ser complicado de reparar.
Microestaciones de depuración
La microestación es un dispositivo hermético de tratamiento de aguas residuales en el que se lleva a cabo todo el proceso de depuración:
- pretratamiento,
- tratamiento,
- vertido.
Por un lado, gestiona el almacenamiento, la degradación anaeróbica (gracias a las bacterias) y la decantación de las materias en suspensión. Por otro lado, asegura la retención de lodos, la hidrólisis de grasas y la producción de amonio, todo ello en tres compartimentos distintos.
Se distinguen dos grandes categorías de microdepuradoras: las de cultivo fijo (en las que las bacterias se fijan a soportes) y las de cultivo libre (en las que las bacterias están en suspensión). En ambos casos, los filtros se pretratan con enzimas específicas para reforzar el desarrollo y la capacidad de las bacterias para depurar eficazmente el agua.
A pesar de sus numerosas cualidades, las microestaciones presentan un gran inconveniente: deben funcionar con una alimentación eléctrica permanente. Con este sistema de saneamiento individual, el ciclo de tratamiento debe estar activado permanentemente para evitar la muerte de las bacterias. Por lo tanto, la microestación no es adecuada para una residencia secundaria. También requiere muchos vaciados debido a la rápida acumulación de lodos debido a su compacidad.
Las letrinas secas
Las letrinas secas, que funcionan mediante compostaje, complementan los sistemas de tratamiento de aguas residuales domésticas en las construcciones ecológicas. En este sistema de saneamiento individual, la orina y las heces caen en una cámara de compostaje donde una cama absorbe las líquidos e inhibe los olores.
Para garantizar un buen funcionamiento, los retretes secos a menudo requieren un dispositivo de ventilación forzada o incluso un sistema de vacío sanitario. Además, el área de compostaje debe ser estanca y estar dimensionada de manera que permita un tiempo de maduración e higienización suficiente.
Aunque el proceso de las letrinas secas es innegablemente ecológico, su uso práctico presenta limitaciones. Requiere la adición de serrín u otros residuos vegetales cada vez que se utiliza. Además, el vaciado debe realizarse con frecuencia. También se plantea la cuestión del lugar adecuado para verter los residuos orgánicos, ya que no se puede hacer en cualquier lugar.
El inconveniente ecológico de las letrinas secas radica en el hecho de que solo tratan las aguas residuales de los inodoros y no las otras aguas procedentes de los fregaderos y las duchas. Por lo tanto, son ecológicas principalmente para un uso único o complementario, pero son menos adecuadas para el tratamiento de todas las aguas procedentes de una vivienda.

¿Qué presupuesto hay que prever para la instalación de un sistema de saneamiento individual ecológico?
El precio de un sistema de saneamiento natural individual y ecológico varía en función de varios criterios:
- el sistema de saneamiento,
- la calidad,
- el tamaño de la instalación.
El saneamiento individual mediante fosa séptica cuesta entre 3500 € y 8000 €, mientras que una microestación de depuración tiene un precio de entre 6500 € y 12 000 €. Si opta por la instalación de un retrete seco, el coste varía en promedio entre 1500 € y
3000 €. Estas opciones pueden ser tentadoras, pero implican importantes gastos de mantenimiento y vaciado regulares.
En Aquatiris, puede instalar su estación de fitodepuración a un precio competitivo de entre 11 000 y 16 000 €. El coste inicial puede parecer elevado, pero sigue siendo una inversión ecológica y económicamente rentable a largo plazo. Una vez instalada, le ahorrará costosos gastos de vaciado y mantenimiento. Póngase en contacto con nosotros ahora para obtener un presupuesto gratuito.